Salida en solitario

Como bien dice en el título, en esta entrada quiero comprartir un poco con vosotros como fue mi primera salida en solitario con muñecas; pero antes de contaros como fue, quiero explicaros un detalle sobre mi.

Yo siempre he sido una persona bastante independiente, de las que intentan arreglárselas sola en todo a no ser que realmente vea que no puedo, de no necesitar a nadie para hacer algo o ir a algún sitio.
Los que me conocen desde hace AÑOS (creo que solamente hay una persona aquí de estas y no sé si llegará a leer esta entrada «Hola PUTE», por siaca), saben que yo tengo un santuario, un santuario al que bueno, hace unos años que no voy, pero en el que cogía y desaparecía yo sola yendome a caminar por la montaña, pero en plan, de volver y llevarme broncas por todos lados; de los amigos por no encontrarme y de mis padres por irme sola por la montaña sin saberlo nadie por si me pasaba algo…
En cierto momento, me rompí; cosas en mi camino hicieron que de repente me volviera dependiente y aunque yo sabía que era independiente, no era capaz de hacer cosas sola como salir a la calle; que lo hacía, pero me sentía muy incómoda.
Al meterme en este hobby se puede decir que me ayudó a recuperar esa independéncia y poco a poco me he ido recuperando de toda la mierda que arrastraba. Aun así, lo de ir sola por ahí con alguna muñeca para hacer fotos en un sitio publico, al aire libre, en el que me pudiera ver la gente, seguía pareciéndome un peldaño demasiado alto al que subir…

En fin, hace unos meses alguien me dijo que debía salir de mi vida por ser muy independiente y supongo que aunque lo sabía; que lo he sabido siempre, lo había olvidado; había olvidado que si, que soy independiente, que no necesito a nadie para hacer o deshacer, para ir o venir; y aunque no esté diciendo que ese peldaño se haya encogido radicalmente, si que puedo decir que por lo menos me he encarado a el estos ultimos meses y quizás no me había dado cuenta, así que estoy contenta.

Dejo de soltaros el rollo va. La verdad es que mi día en solitario fue genial, si que es cierto que por la mañana estuve en la inauguración de la tienda donde ha comenzado a trabajar una amiga, pero fueron unas horitas, además como también fui sola diremos que cuenta.
Me tomé el día con calma, simplemente dejando que pasara el tiempo sin preocuparme de la hora, de si ahora tengo que ir a tal sitio, o si tengo que comer, o si pierdo el tren, nada; simplemente dejé que fuera mi día.
Me llevé a Wylla que aunque quiero hacerle una buena puesta a punto y alguna cosilla en mis vacaciones, me apetecía sacarla, y a Nora, que me moría por hacerle alguna foto con su outfit para el Dolly Festival.
Que sí, que una de las cosas que más me gusta del hobby es ir de kdd con el grupito de taradas que tengo por amigas y hacer el retramonguer cada una con su muñeca y hablar de cualquier cosa, tenga o no que ver con el hobby, pero la verdad es que también me gusta pasar tiempo conmigo misma y disfrutar del silencio y en mi día, hay silencio.
Comí tranquila en un chino, me fui al parque en el que al ser medio día/primera hora de la tarde no había mucha gente, así que mi compañía fue el canto de los pajarillos y el solete; y estuve muy tranquila, hice fotos, me senté un rato a pelar la pava en un banco, paseé, volví a ponerme con las fotos…, disfruté del parque y de mi silencio hasta que repentinamente comenzó a solpar un viento de cojones, alguien soltó una manada descontrolada de crios que o se volvieron locos o estaban haciendo una gincana o algo porque iban por grupos y gritando cosas de Harry Potter de acá para allá y por lo tanto resultó imposible seguir haciendo fotos; es lo que tiene, la combinación de viento huracanado y manada de crios en estampida no es buena para la tranquilidad ni para hacer fotos.

Con mi campamento recogido me puse a caminar y como a Lena no le gusta caminar, me bajé del parque dando una vuelta hasta la playa, me recorrí todo el paseo marítimo, seguí caminando y cuando me di cuenta estaba en el Magic (un centro comercial que hay en mi ciudad) y como me dió todo el antojo, pues me senté en la terraza del McDonalds a comerme un McFlurry de filipinos con chocolate blanco, de allí me fui a casa, creo que llegué sobre las 20.30, así que me duché, descargué y edité las fotos que hice y mientras lo hacía me di cuenta de que había pasado un día la mar de agusto y que me sentía relajada.

Creo que puedo decir que fue todo un exito mi salida y debería hacerlo más; darme un día para mi de vez en cuando, coger alguna muñeca, irme por ahí, caminar, disfrutar de mi silencio y poco a poco ir recuperando esa parte de mi de la que aun y conociendo su existencia, aun estaba en el olvido. Empezar a escalar ese peldaño y llegar a coronarlo.

Y nada, perdón por el tostón, pero creo que para contar como fue mi experiencia era necesario explicar un poco la situación que hace que sea un pequeño logro, ya que igual muchos pueden pensar «pues vaya cosa, no es para tanto», y es posible, pero cuando tienes ciertos bloqueos hasta la más pequeña tontería puede significar todo un mundo al que afrontar, así que para acabar solo puedo decir:

MINI PUNTO PARA LENA!